En plana tarde, después de un día lleno de locuras, surge lo perfecto de vivir frente al mar, que es caminar un poco y descansar en la playa.
Les comparto unas fotos de este día junto a Carolina, mientras mirábamos algunos detalles de las olas.
El sol aunque tarde, seguía dando calor con bastante animo, junto a el una pequeña nube, formaba un tímido arco iris.
En el horizonte, un barco llegando al puerto, de Arica, recorriendo el océano pacifico, viviendo mas de alguna aventura.
Fotos: Felipe Olaechea