Los niños de las Salitreras en la Pampa en la Región de Tarapaca, jugaban con pedazos de alambres que convertían en sus juguetes, la imaginación y el desierto eran sus limites infinitos en un mundo difícil donde la supervivencia era un esfuerzo diario.
En medio del desierto encontré estos restos de un zapato de trabajador pampino, mudo testigo en el silencio del calor de lo que sucedió con su dueño.
Restos de una oficina Salitrera, en las cercanías del poblado de Huara, es lo que queda de la época de oro blanco.
Fotos y Texto Felipe Olaechea